Un ultrarresumen fotográfico para mostraros algunos de los lugares que visitamos con nuestra furgo hace 4 años, en diciembre. Es una lástima que esta zona esté tan desprovista de campings durante el invierno y que, en alguno de ellos, como el de Burgos, ni siquiera hay agua caliente (en la sierra de Gredos no nos dejaron utilizar el baño porque tenían el agua cortada para que "no se congelasen las tuberías"; pero te cobraban igual: estafadores).
La primera ciudad que visitamos fue Burgos, donde impresiona la Catedral.
Luego llegamos a Salamanca, que no nos decepcionó a pesar de las altas espectativas ya que todo el mundo habla maravillas de la ciudad. Tal vez eso sea precisamente lo malo, que todo el mundo parece estar en la ciudad a la vez que tú. Nos encantó la plaza mayor (echamos una de menos en Zaragoza).
De allí nos acercamos hasta Ciudad Rodrigo, sitio fronterizo que caracteriza su arquitectura, lo que tal vez supuso demasiados kilómetros para los pocos días que estuvimos.
Conocimos Ávila, aunque no hemos puesto fotos, es muy bonito recorrer sus murallas.
Fuimos hasta Segovia, que nos sorprendió gratamente (es mucho más que un acueducto). Allí visitamos La Granja, que me recordó a Versailles, y comimos cochinillo (aunque seguimos prefiriendo el ternasquico de Aragón).
Teníamos unos amigos que iban a pasar la nochevieja en una casa rural en un pueblecillo de Soria, así que decidimos visitar la Laguna Negra (estas ciudades son preciosas; pero necesitamos algo de monte, si no no son vacaciones) que estaba congelada, como se me quedaron a mí los dedillos de los pies. Es un lugar muy bonito que, en esa época, estaba envuelto en una atmósfera "mágica". El agua se oía discurrir debajo de la capa de hielo y se esculpía en formas caprichosas. Merece la pena un fin de semana entero y tenemos ganas de volver por esa zona; especialmente, para conocer el Cañón del Río Lobos, pero tampoco cuenta con camping en invierno :(
En total fueron 4 noches y unos 1000km. Estas ciudades son muy cómodas de visitar y puedes hacer un safari fotográfico arquitectónico en unas horas si no te interesa entrar en cada edificio. Creo que las que más nos gustaron fueron Salamanca y Segovia: os animamos a conocerlas. No le temáis al frío, se tolera mucho mejor que en nuestra ventosa (o neblada) ciudad.
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